¿Por qué no se recorta el déficit en los parquímetros de la periferia?

El alcalde de Madrid, Ruiz-Gallardón, ha anunciado un recorte del 20% en los gastos municipales, afectando a importantes servicios sociales.

Además tiene previsto revisar a la baja algunos contratos que el Ayuntamiento tiene con empresas adjudicatarias de servicios.

¿Por qué no aprovecha para cortar la sangría que supone la extensión de los parquímetros a la periferia, que además están provocando la ruina del pequeño comercio y gastos extraordinarios a los vecinos?

El Ayuntamiento de Madrid amplió el SER en 2006 a tres nuevas zonas periféricas, incluso más allá de la M-30. Los tribunales declararon nula esa ampliación, por lo que los contratos son ilegales así como las multas impuestas y los cobros realizados por tarjetas y tiques.

Según datos del propio Ayuntamiento, en estas tres zonas de ampliación los pagos a las empresas concesionarias superan en 20 millones de euros a los ingresos que se genera, lo que significa undespilfarro para un servicio que, en la periferia, no es útil y ha sido rechazado por los vecinos y comerciantes.
Además el Ayuntamiento de Madrid continúa pagando a las empresas el canon por unas plazas azules de los cascos históricos que fueron suprimidas en mayo de 2006, lo que ocasiona un gasto añadido de 600.000 euros anuales por un servicio que no se presta.

Sería además un gesto de sensatez por parte de un alcalde que, sabiendo que cometió un grave error al extender los parquímetros más allá de donde puede ser razonable, se niega sistemáticamente a reconocer dicho error. Es algo que debe hacer antes de abandonar su puesto de regidor madrileño.